Si buscas arroces, entre otras delicias gastronómicas distintivas en Alicante, no puedes perderte Koiné, el restaurante de alta cocina alicantina con alma andaluza liderado por el talentoso chef Juanlu Parra.

No es la primera vez que un andaluz sorprende llevando sus raíces gastronómicas a otros lares. Pero no todos consiguen el éxito que está teniendo Juanlu Parra, nacido en Linares (Jaén) pero criado en Alicante desde su adolescencia, seguramente porque él ha mamado la pasión por la cocina desde pequeño.

Tras formarse con maestros como Dani García y pasar una década en sus restaurantes de Marbella, decidió regresar a su tierra adoptiva para montar Koiné Bistró, su proyecto personal junto a su mujer, María García, una todoterreno que se ocupa de la sala, la decoración y hasta pinta los cuadros. Desde luego, ambos cuidan al máximo cada detalle, desde el pan de masa madre hasta la mantequilla de oveja, pasando por un servicio atento pero distendido.

Koiné significa lengua común

En Koiné, palabra que en griego significa «lengua común», Juanlu fusiona sus raíces andaluzas con las influencias mediterráneas y alicantinas en una propuesta fresca, creativa y muy personal. Desde el primer bocado, te cautivarán platos como la ensaladilla rusa con tartar de atún rojo y un huevo frito con la yema escondida en un panecillo chino, un guiño divertido a un clásico que aquí se reinventa con sutileza.

Entre las sugerencias fuera de carta, se pueden encontrar joyas como el atún en descargamento y en ventresca con su ajoblanco, espectacular, y helado de hierbabuena.

La maestría de Juanlu brilla en recetas tradicionales elevadas a la enésima potencia, como la oreja de cochinillo confitada hasta quedar crujiente por fuera y tierna por dentro, acompañada de una sedosa salsa de jamón ibérico.

O el gazpacho de remolacha ahumada, servido con un espectáculo de hielo seco que lo enfría al instante ante tus ojos.

Los arroces son uno de los grandes fuertes de Koiné, con creaciones como el meloso de pato, boletus y yema curada que te transportan al levante español del mejor nivel, mira esa capa fina de arroz con su socarrat perfecto, tan fina que me pude comer yo sola la paella entera porque Juanlu también tiene en cuenta a los solteros, ¡gracias!

Y no podían faltar los guiños a la caza, como los rigatoni rellenos de liebre con toques dulces y salados, una barbaridad de plato.

El postre estrella, como ya te contamos en el reportaje de las mejores tartas de queso: una delicada tarta de queso payoyo malagueño con helado de leche quemada.

Además, Koiné apuesta por el producto local de calidad, con pescados de la lonja, arroces de Molino Roca y quesos artesanos. Y no faltan los guiños líquidos a Andalucía, con una bodega donde generosos maridan a la perfección con su cocina mediterránea con alma sureña.

En definitiva, Koiné es uno de esos restaurantes que te enganchan por su autenticidad, su sensibilidad gastronómica y la pasión que derrochan Juanlu y María sin dejar de ser lujo asequible, con menús degustación a partir de 50€ que te harán levitar de placer sin necesidad de arruinarte. Un pequeño rincón alicantino que ya apunta a estrella Michelin y que ningún bon vivant debería perderse. ¡Palabra de sibarita!

Si quieres saber más, escucha la entrevista completa de este hombre miembro de Mujeres en Gastronomía (MEG) en el pódcast de Vermú Torero.

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